Quito, 11 abr (Prensa Latina) Ciudadanos de Ecuador exigen hoy la liberación del exvicepresidente Jorge Glas desde los exteriores de la Corte Nacional de Justicia, institución que analiza un pedido de habeas corpus a favor del político.
Con carteles y consignas, un grupo de ecuatorianos pide a la justicia que otorgue este recurso para que el exvicepresidente pueda defenderse en libertad tras ser secuestrado en la embajada de México, país que le otorgó asilo.
En representación del Comité 2 de Octubre, la activista Rosa Pacheco pidió que se detenga la persecución política contra el exvicepresidente e instó a los jueces a actuar apegados a la ley.
Otro grupo también acudió a respaldar las acciones del presidente Daniel Noboa, quien autorizó la irrupción violenta en la sede diplomática para detener a Glas, una decisión repudiada por la comunidad internacional.
El habeas corpus en debate este miércoles fue presentado por el expresidente nacional del movimiento Revolución Ciudadana (RC) Francisco Hidalgo y está centrado en la ilegalidad de la detención, que -según alega- violó los derechos humanos del exvicepresidente y normas internacionales.
En la audiencia comparecen vía telemática la ministra de Gobierno, Mónica Palencia, abogados de la Policía, las Fuerzas Armadas, la Procuraduría General del Estado, y otras instituciones.
Glas, que permanece en huelga de hambre y denunció maltratos, también participa en la diligencia conectado desde la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil, donde se encuentra desde el pasado sábado.
El exfuncionario es considerado uno de los símbolos del «lawfare» en Ecuador.
Recibió de forma temporal el beneficio de la prelibertad el 28 de noviembre de 2022, luego de la unificación de dos penas de cárcel de seis y ocho años por los casos Odebrecht y Sobornos; sin embargo, la medida fue revocada.
A inicios de este año, la justicia ordenó la captura del exfuncionario por presunto peculado en el caso denominado Reconstrucción de Manabí, que investiga una supuesta malversación en obras públicas tras el terremoto de 2016.
En ese contexto, México le otorgó asilo político a Jorge Glas, pero efectivos de las fuerzas policiales allanaron la embajada mexicana en Quito, tras lo cual fue arrestado y recluido en La Roca.